Mientras estamos con la mano en la puerta del 2022, la sabiduría dice que debemos tomarnos el tiempo para mirar atrás y recordar lo que Dios nos ha enseñado. Greg Powell, un querido pastor amigo y socio de Selah Internacional, nos brinda algunas lecciones poderosas aprendidas en el 2021 que todos deberíamos reflexionar. ¿Cuáles lecciones has aprendido Tú?
“Me acordaré de las obras de JAH; Sí, haré yo memoria de tus maravillas antiguas.” (Salmo 77:11)
21 Lecciones/Recordatorios del 2021
By Greg Powell
- Muchas de nuestras vidas se han ralentizado. Disminuir la velocidad solo es beneficioso si se usa para avanzar en nuestro amor por Jesucristo y nuestras familias.
- El mundo vende miedo como vende cualquier otro bien. La paz no es algo que el mundo pueda jamás darte. La verdadera paz interior solo se encuentra en Jesucristo.
- Una de las cosas más incómodas es ver fotos de viajes y encontrarse con gente en fiestas y restaurantes que no ha visto en la iglesia en un año.
- Cada año se aleja un poco más de lo que pretendíamos que era importante y poco a poco va tejiendo nuestras verdaderas prioridades.
- Una pandemia de soledad y depresión es una amenaza mucho mayor que cualquier virus y debemos hacer lo que podamos para curar las heridas que las personas tienen en sus vidas.
- Las pruebas hacen que la gente se vuelva hacia el cinismo o la gratitud. Los acontecimientos de nuestra vida deben impulsarnos más hacia la humildad y el agradecimiento que hacia la ira y la reclusión.
- El regreso de Jesucristo está más cerca que nunca. Viva de tal manera que demuestre que lo crees desde la profundidad del corazón.
- Las largas caminatas en silencio, la oración y a solas nos sacarán de nuestras propias cámaras de eco.
- No permita que el fracaso de alguna celebridad o líder cristiano te dé excusa para no creer las promesas fieles de Dios o le quite la determinación de seguir defendiendo lo que es correcto.
- No tenga tanta prisa por salir de la situación en la que te encuentras como para perderte la lección que puedas aprender en medio de ella.
- En lugar de escuchar la narrativa de los medios en constante cambio, la noticia del año debería ser el flujo constante de misericordia y gracia de nuestro Dios inmutable que nunca nos ha abandonado.
- Preste más atención a las Sagradas Escrituras probadas y verdaderas que a la novedad de la cultura.
- Realmente necesitamos evaluar por qué nuestro tiempo semanal en la tecnología y la tele se mide en horas y nuestro tiempo de desarrollo espiritual se mide en minutos. La oración incluso se puede medir en segundos cada semana.
- No solo necesitamos la predicación de la Verdad de la iglesia, sino también necesitamos comunidad y conexión con nuestro grupo local de seguidores de Cristo.
- Mi esperanza debe basarse nada menos que en la sangre y la justicia de Jesús.
- Quiero ser famoso en mi familia, ante todo, en lugar de ser un héroe en el trabajo o un campeón de mi iglesia.
- Ningún individuo, organización o partido político tiene el control por mucho que parezca. Dios siempre está cumpliendo sus propósitos de manera activa y soberana.
- La dificultad elimina todas las formas externas de validación personal. Si no aprende a poner su esperanza en Dios y basar su identidad y propósito en Jesucristo, ningún año volverá a ser verdaderamente satisfactorio o normal. El 2022 no será mágicamente mejor a menos que te enfoques más en Jesús.
- No te sorprendas de lo que se llama “normal” en la sociedad. Se una luz en un mundo oscuro. Nadie ha vivido en una época en la que vivir una vida santa era fácil.
- Aprecia cada momento con otras personas como si fuera la última vez que los vieras en la tierra.
- Dios no falló ni una promesa ni fue expulsado de Su trono eterno como Rey de Reyes en el 2021, y el 2022 no será diferente.
“Yo soy el Alfa y la Omega, principio y fin, dice el Señor, el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso.” (Apocalipsis 1:8)